Hace ya un año de la firma por estas mismas fechas del “Equal Representation in Arbitration Pledge“, manifiesto que un gran número de instituciones, despachos y otros implicados en el mundo del arbitraje en España firmamos en el despacho de Juan Fernández-Armesto.
El Pledge, como se le conoce en el arbitraje internacional, fue lanzado en 2016 y persigue promover una mayor representación de mujeres en tribunales de arbitraje. La iniciativa busca concienciar a todos los intervinientes en las diversas etapas del arbitraje internacional de la necesidad de una mayor diversidad de género. Diversidad que, sin duda, irá acompañada de mayor riqueza en el sector y apertura a otros modelos y cambios innovadores.
El Pledge, como se le conoce en el arbitraje internacional, fue lanzado en 2016 y persigue promover una mayor representación de mujeres en tribunales de arbitraje.
Concienciar, identificar y promover
¿Y cómo afectan este tipo de iniciativas en el arbitraje? A corto plazo, este movimiento ha significado la apuesta por la idea en otras partes del mundo como, por ejemplo, Arabia (Women in Arab Arbitration). Asimismo, recientemente, en España nació el CEA Mujeres, como una comisión del Club Español del Arbitraje que, a través de sus socias, principalmente -aunque está abierto a los socios- busca fomentar la incursión de la mujer en el arbitraje en nuestro país.
Como secretario general de la Asociación Europea de Arbitraje, también me he unido al momento de concienciación del sector en relación con el género contribuyendo con el compromiso de nombrar, al menos, a un 30% de mujeres en los arbitrajes administrados desde nuestra Asociación.
La incorporación de la mujer es un tema protagonista en, quizás, todos los sectores profesionales de nuestra sociedad, pero ¿cómo conseguirlo de manera efectiva? No se trata de un cambio automático, sino una adaptación de la sociedad que sistemáticamente va avanzando hacia un modelo más justo y equitativo:
- Concienciar sobre la igualdad de oportunidades,
- identificar las barreras que impiden el acceso pleno de la mujer a determinados puestos,
- y llegar a aquellos ámbitos de la sociedad que tienen en su mano decidir sobre ello es vital.
Cuando veamos diversidad de nombres entre los candidatos a ejercer como árbitros y diversidad en la composición de los paneles de congresos, directivas o consejos asesores, sin que ello sea noticia, habremos dado un gran paso hacia delante. Entretanto, hablemos de ello, también ayuda.